martes, 23 de diciembre de 2014

CON ACENTO EN LA A

Paciente espectadora de mis locuras,
de mis proyectos y casuística,
receptora de mis fracasos y dudas,
tus reacciones, mi estadística.

Psico-loca de profesión,
de clientela versátil
militares, conductores, algún cazador,
portadores de parásitos chupa-sangres.

Siendo vecino tuyo,
ya limítrofe desde la cuna,
normal que la psique estudiaras,
prácticas te sobraban.

Del Nara vestiste casaca,
jugadora del año, una vez,
diga lo que diga una placa,
para mi siempre serás m.v.p.

En el CEI aumentó tu palmarés,
la de la marca en la pierna, eras,
tu alter ego, tu ejemplo fiel,
Villacampa y Kurt Cobain,
menos mal que a este último
caso no hiciste al cien por cien.

Fotografía obra de Justo Monroy ©


Multidisciplinar en idiomas,
otro pabellón en el que destacas,
pero esto no está en genes ni genoma,
pues a mi, hasta el inglés, me da resaca.

Llegó un tiempo de distancia y pena,
en que tu espíritu se volvió inquieto,
primero Irlanda, luego Boston y Viena,
Fillias Fog de ciento en viento.

Decidiste mostrarte
tal y como eres
princesa guerrera por estandarte
frente a lo que otros piensen.

Tus amores, polivalentes,
alimentan la polémica,
diste la cara,
apretaste los dientes,
soportaste de soslayo
las miradas impertinentes.

Llevas toda tu vida en mi vida,
incluso antes de nacer,
pues sabía que vendrías,
más por deseo, por querer,
que por dominio de la astrología.

Si no hubiera sido así,
menuda existencia baldía,
¿qué habría sido de mi
sin mi panacea femenina?



Para mi hermana Mária
(con acento en la a), alias Xena


Poema publicado en el libro "Desaborios, Compañeros de Viaje" (marzo de 2011)