Autor: Orson Scott Card
Editorial: Planeta DeAgostini
Año: 1977
Valoración: 6’5
Temática: Ciencia-ficción
En el año 2070 la humanidad está en guerra
con los insectores, una raza extraterrestre a la que ya derrotaron, pero con
grandes dosis de suerte, ya que estos seres se encuentran en enorme superioridad.
Para preparar el enfrentamiento final, la Escuela de Batalla recluta niños a
partir de los seis años con el fin de adiestrar y buscar al que será estratega
y guía de la flota en el planeta enemigo. Los niños prodigio seleccionados
deberán pasar durísimas pruebas físicas y mentales, sobretodo el protagonista,
Andrew Wiggin (Ender), al que aislarán y presionarán sin piedad para obtener lo
mejor de él (o lo peor).
Podría parecer la típica historia de
ciencia-ficción con naves, armas láser, batallas, etc., pero no. Poca acción de este
tipo encontraremos. La novela se basa en el desarrollo y crecimiento de Ender
desde una perspectiva psicológica. Nos mostrará sus miedos, dudas, temores,
locuras, desde el punto de vista de un niño al que obligan a ser adulto desde
muy temprano. Sentirá frustración, odio, ira, depresión, en su crecimiento
hacia el liderazgo de la humanidad. Ese es el punto más destacado, la
psicología del personaje.
Por el contrario, echo en falta más acción,
ya que la que aparece se limita a juegos de ordenador, simuladores y
entrenamientos en salas cerradas. Durante todo el libro se habla de la gran
guerra y resulta que cuando llega, dura un abrir y cerrar de ojos. Lo veo poco
verosímil, al igual que la educación y el comportamiento de Ender tratándose de
un niño de seis años.
Ha obtenido los premios más prestigiosos de
la ciencia-ficción (Nébula y Hugo) y es el primero de exitosas sagas (la Saga
de Ender, la Saga de las Sombras, etc.), aun así me esperaba mucho más y,
aunque lo he leído de un tirón, me ha decepcionado un poco. Sé que hay gran
cantidad de seguidores de estos volúmenes a los que mi opinión no gustará, pues
muchos de ellos mitifican la obra de Orson Scott Card, pero mentiría si dijera
que tengo ganas de leer la segunda parte. Que me disculpen por ello.
Si nunca habíais oído hablar de “El Juego de
Ender”, deciros que la Warner quiere estrenar una superproducción
cinematográfica en menos de un año, así que estará hasta en la sopa.